La soledad se define como una situación en la que un individuo se aísla de forma voluntaria o involuntaria, alejándose de la compañía de otras personas. Este estado puede traer consecuencias graves si se mantiene con el tiempo, por lo que es primordial que se busque ayuda.
Precisamente, la Organización Mundial de la Salud -OMS- ha definido el término “soledad” como un “problema de salud pública mundial” debido a su gran alcance y magnitud.
En esta línea, médica psiquiatra y CEO de Grupo Cetep, Dra. Claudia Barrera Renault, explica que este estado de aislamiento social es capaz de afectar tanto la Salud Mental como el Bienestar general, ya que “se asocia con un aumento de hasta el 50 por ciento de la demencia y un aumento del 30 por ciento de los accidentes cerebrovasculares y las enfermedades cardiovasculares, así como una mayor prevalencia de cuadros depresivos”, asegura.
Pese a estar presente mundialmente, la soledad es completamente silenciosa porque “no llama la atención, no hace ruido, no aparece en las noticias, pero aparentemente es nuestra nueva pandemia”, agrega la CEO de Grupo Cetep. Por esto es de suma urgencia visibilizar esta temática de manera pública, e instar la implementación de medidas concretas que permitan evitar que las personas aisladas desarrollen enfermedades mentales y físicas.
Esta “posible nueva pandemia” ya se ha tomado la agenda internacional. En 2018, Reino Unido dio el primer paso, creando la Secretaría de Estado para la Soledad. En 2021, Japón le siguió los pasos, y creó el Ministerio de la Soledad, en respuesta al incremento de suicidios. En 2023, la ciudad de Nueva York nombró una Embajadora de la Soledad. Asimismo, países como Alemania, Canadá, Australia y España ya reconocen el impacto de la soledad en la salud pública y están tomando medidas al respecto.
Y porque es importante que conversemos sobre Salud Mental y Soledad, te invitamos a contestar esta encuesta, que nos permitirá hacer una radiografía sobre los niveles de soledad en la población.
